Durante las noches del viernes y el sábado, los inspectores recorrieron restaurantes, bares, salones de fiestas, etc., controlando que no hubiera más de 200 personas y se respetara la proporción de público permitido establecida, de una persona por metro cuadrado, así como la distancia entre mesas que no podrá ser menor a un metro.
De acuerdo el reporte del área, los locales bailables decidieron permanecer cerrados, en tanto que no se registraron faltas en el resto de los locales inspeccionados.